Marzo del 2022, la izquierda latinoamericana se acaba de enterar que en la segunda mitad del siglo XX, la Unión Soviética invadió Hungría, Chekoeslovaquia, Afganistán. En tres meses más, dependiendo de los post de FB, y los videos de tik tok, se irán enterando de la ocupación de los países bálticos, en más o menos seis meses llegarán a la conclusión que el mayor caso de imperialismo en el siglo xx fue liderado por los comunistas y van a salir con alguna frase como: «debemos ser autocríticos». (Lenin trató de darle un sentido económico a la idea de imperialismo para tratar de convencer a la gente sencilla que imperialismo tiene que ver con tratados comerciales, y no con la salvajada que han hecho los rusos de comerse media Asia).
Putin ha dicho varias veces que la caída de la URSS fue una tragedia, también expresó en días recientes que la «descomunización» de Ucrania y la eliminación de monumentos soviéticos fue una de sus motivaciones de guerra, impresionante el cinismo de esa bestia.
La Rusia de hoy no es comunista, pero sí ha sido el estado que con más potencia ha respaldado los corruptos proyectos del socialismo del siglo XXI, y estos líderes a su vez apoyan la guerra criminal en Ucrania (y ojo que sí entiendo la necesidad de los rusos que viven en Ucrania de defenderse a sí mismos en las regiones del Dombas, pero la ocupación de todo el país y la masacre de civiles es otra cosa).
La Rusia de hoy mantie pretenciones imperiales ; Chechenia sigue sujeta a la Federación Rusa, por sobornos o algo peor, al igual que otros casos menos conocidos. Y en cuanto a sus aliados euro asiáticos, como Bielorrusia, Kazakhstan y otros, se trata de naciones que se me tienen cercanas a Moscú desde el sostenimiento de dictadores bien alimentados. El imperialismo ruso, se desangra y es excesivamente caro. La mayor crítica a él vendrá del mismo pueblo Ruso.
Andrés Ortiz Lemos