“Están en juego las elecciones” es lo que dice Rafael Correa en su Voice Message enviado a sus grupos políticos, en una evidente posición de desesperación al ver que su candidato cae en las encuestas.
Los resultados no le favorecen de ninguna manera al Correísmo, porque su candidato está tan desprestigiando, que ninguna tendencia política los respaldarían en una segunda vuelta. Su única salida es la de alterar el orden y provocar un estallido social.
Correa habla de una supuesta “suspensión de las elecciones”, ya sabemos que el Correísmo acusa a otros de lo que ellos mismos provocan, y su acción nos alerta sobre sus intenciones. Desconocemos sobre algún riesgo de una posible “suspensión de las elecciones” pero alertamos a las autoridades para que investiguen a fondo y pidan declaraciones a los líderes políticos de la campaña de Andrés Arauz y a los observadores enviados por Maduro, el español José Luis Rodríguez Zapatero y miembro del Grupo de Puebla, que ya participó como observador en las elecciones de Bolivia y anunció su intención de hacerlo también en las de Chile.
Definitivamente son una mafia que difícilmente renunciarán a destruir al país, debemos declarar al Correísmo como una organización criminal y combatirla, si queremos paz y prosperidad para nuestro país.